lunes, 22 de febrero de 2021

Mirmecología: el fascinante mundo de las hormigas

¡Hola a todos!

Hoy quiero hacer un posteo muy especial para mí, ya que abordaré una de mis aficiones favoritas: la mirmecologia. Esta es una rama de la zoología que se ocupa del estudio de las hormigas y su comportamiento.
Inicie en este hobbie hace aproximadamente dos años cuando me regalaron mi primera colonia, y me sentí motivada a arrancar gracias a un maravilloso canal de YouTube llamado El mundo de las Hormigas (recomiendo encarecidamente echarle un vistazo, su contenido es grandioso). El estudio de estos animales es muy interesante y puede amoldarse perfectamente  para trabajar con diversos temas del nivel primario a través de la crianza de hormigas en casa o en el aula.

La colonia funciona como un organismo unico. Todas y cada una juegan un papel dentro de su comunidad, y trabajan en equipo para sobrevivir. En esta imagen podemos ver como arman un puente para poder llegar al otro lado.

Mi propósito con este post es darles un vistazo general a este mundo en miniatura y enseñarles como pueden encaminar sus propios hormigueros en casa. Así mismo, me gustaría comentarles mis experiencias como criadora y enumerarlos un listado de recursos e información que pueden ser de gran utilidad si deciden encaminar un proyecto en la escuela.

Antes de salir a comprar cualquier tipo de hormiguero artificial, es primordial conocer primero al animal que vamos a criar. Cuando uno piensa en una criatura tan básica como la hormiga cree saberlo todo, pero los cierto es que hay muchas cosas que damos por supuestas que no son así, y estoy segura que se sorprenderán a medida que vayan avanzando con el estudio y la crianza de estos insectos.

Todo hormiguero tiene un inicio, y este inicio es la hormiga Reina. En las épocas de lluvias llegando la primavera,  las colonias veteranas comienzan a contribuir a la reproducción de su especie dando vida a sus primeros Machos y Princesas. Únicamente estos dos serán capaces de reproducirse, puesto que el resto de las hormigas de la colonia serán infértiles.

Ambos nacerán con alas, y cuando su desarrollo se completa abandonarán el hormiguero que los vió nacer y saldrán a volar. En este evento llamado “vuelo nupcial” las hembras y los machos se encontrarán y reproducirán. Una vez llevado a cabo este encuentro el macho morirá y la hembra ya fecundada, comenzará a buscar un lugar  húmedo y oscuro  en donde  anidar y comenzar su propia colonia. Una vez se encuentre cómoda y segura, la princesa (ahora reina), se cortará sus alas y las comerá para obtener nutrientes. Al poco tiempo pondrá sus primeros huevos, los cuales pasarán por distintas fases de desarrollo hasta convertirse en hormigas adultas.

Fases de desarrollo de la hormiga. Creditos a agronomaster.com

Algo curioso de estos insectos es que se reproducen esta única vez. La reina almacenará el semen obtenido en este primer y único encuentro, y lo utilizará a lo largo  de toda su vida para dar vida a sus crías. Ella será el centro de la vida en el hormiguero, decidirá la cantidad de huevos que pondrá, cuando los pondrá y que jerarquía ocupará cada uno de ellos. Las hormigas que nazcan de ella le brindarán toda su obediencia y la defenderán a toda costa de cualquier tipo de depredador o amenaza incluso hasta el punto de dar su vida por ella, pues la naturaleza es sabia y las pequeñas obreras saben muy bien que sin su reina la colonia está condenada a morir.

Entonces, lo primero que debemos conseguir para comenzar un hormiguero es una Reina. De nada sirve tomar un puñado de hormigas de una colonia cualquiera y colocarlas dentro de un formicario, pues morirán a los pocos días por el estrés y no habrá nadie que las reemplace cuando ellas mueran. Tampoco es válido destruir un hormiguero de la naturaleza  para robar una reina de su colonia, pues ella estará acostumbrada a vivir en libertad, y el cambio de ambiente sumado a la perdida de sus obreras y huevos supondrá también su muerte por estrés.

Para iniciar nuestro hormiguero artificial necesitamos una Reina recién fecundada. La colonia debe nacer, crecer y morir en manos de su criador. Es la única manera de garantizar su supervivencia y  de no impactar en el medio ambiente destruyendo colonias ya formadas.

¿Y cómo conseguimos una Reina entonces? Hay dos opciones. La primera y más complicada (aunque divertida) es capturar una reina durante los vuelos nupciales. Este año me animé a hacer mis primeras capturas, una actividad muy gratificante ya que conseguí nuevas especies para agregar a la familia. Durante la primavera y el verano, los días de mucha humedad  luego de las lluvias, hay que salir a la calle y prestar mucha atención. Al mirar con detenimiento podremos ver a las mal llamadas “Hormigas voladoras”, princesas y machos a mitad de su apareamiento.
Nuestro objetivo será capturar a una princesa fecundada y colocarla dentro de un tubo de ensayo.

Para hacerlo llenarán el tubo con agua hasta la mitad, y luego colocaran un algodón a presión a modo de “tapón”. Este proporcionará el agua necesaria a nuestra reina y proporcionará la humedad necesaria para que ponga sus primeros huevos. Una vez hayan logrado meterla dentro del tubo, cubrirán la entrada con un algodón para que no se escape y lo cubrirán con algún papel o goma eva negra, para proporcionar oscuridad. Tanto la reina como la colonia SIEMPRE deberán contar con un rincón húmedo y oscuro para sobrevivir.

El tubo, entonces, deberá quedar así

Creditos a criarhormigas.es


Esto es lo que se necesita, en resumen, para capturar a nuestra reina. No obstante, no es lo mismo hacerlo que explicarlo. Hay muchos factores que pueden dificultar la captura, pues es difícil saber si una princesa ya ha sido o no fecundada, o distinguir a los machos de las hembras (puesto que son muy parecidos). Para profundizar más en este tema de la identificación y agilizar la captura, al finalizar el post dejaré varios sitios y libros para que puedan consultar este asunto en particular y tener una captura exitosa.

Si el tiempo y la paciencia no están de nuestro lado para llevar a cabo la captura, otra opción es conseguir a la reina regalada. La comunidad de aficionados a la mirmecologia en argentina es muy solidaria entre sí, pues, en grupos de Facebook tales como Mirmecologia Argentina o Hormigas Ants Argentina siempre encontrarán  a alguien dispuesto a regalar o intercambiar colonias en diferentes partes del país. Las reinas también suelen venir de regalo con la compra de un hormiguero artificial en tiendas dedicadas a este hobbie. Al finalizar el post también dejaré los links a  estos sitios para que puedan ver sus productos.

Ahora bien, tenemos a la reina ¿Qué sucede entonces? Pues, si las condiciones del tubo son adecuadas (humedad, oscuridad y un lugar tranquilo libre de vibraciones) la reina comenzará a poner sus primeros huevos. Durante este período la reina no debe ser molestada: debemos observarla el menor tiempo posible  para preservarla en la oscuridad y que no se estrese. En estos días no requerirá ningún alimento, pues ella se valdrá de sus reservas y de la proteína obtenida al comer sus propias alas. Recién cuando nazcan las primeras obreras ella volverá a alimentarse con lo que ellas le den, generalmente por un sistema denominado Trofalaxia.

Intercambio de sustancias mediante trofalaxia. Creditos a ABC.es

El tiempo de incubación de los huevos dependerá de cada especie (pudiendo extenderse desde semanas a meses), porque si, existen muchísimas especies de hormigas, aproximadamente  10mil identificadas.
Cada género tiene sus particularidades taxonómicas, y varían tanto en sus necesidades vitales como en su comportamiento y organización social. Hay hormigas granívoras, omnívoras o directamente carnívoras. Hay quienes tienen sus jerarquías, hay quienes no las tienen, y existen otras muy particulares que invaden y esclavizan a otras especies. Algunas tienen las picaduras más dolorosas del mundo, y otras necesitan convivir en simbiosis con un hongo.
Es realmente interesante contar con varias especies para tomar nota de estas peculiaridades y diferencias. En argentina contamos con muchísima variedad. Adjunto una pequeña galeria para que puedan ver algunos generos de nuestro país e informarse acerca de ellos.

A simple viste podemos ver las diferencias físicas entre cada una de ellas, pero más allá de eso, hay muchos otros factores que las distinguen. Es por ello que es de suma importancia identificar a la reina capturada, para informarse acerca de los cuidados que deben tener con sus colonias. No todas se alimentan de la misma manera, algunas son más fotosensibles que otras, y la humedad que proporcionaremos también puede ser diferente. Así mismo, no todos los hormigueros artificiales irán bien con cualquier especie.

Por ejemplo, este es mi primer hormiguero de la especie  Brachymirmex Patagonicus. Llegó a finales de noviembre del 2019 con su reina (nombrada Isabel) y sus primeras obreras. Hoy ya son 50 y subiendo.

En la esquina inferior derecha, podremos observar la montaña de huevos

Si su crecimiento hubiese continuado de manera normal seguramente serían el doble de lo que son hoy. Sucede que hubo un incidente con un gato y una repisa, y casi toda la colonia murió a causa de ello. Por ende, les recomiendo encarecidamente elegir bien el lugar donde van a colocar sus colonias.
Respecto a la especie, son una de las más pequeñas en tamaño, de gran fotosensibilidad, y con necesidad de humedad media. Además no cuentan con ningún tipo de jerarquía, ya la colonia solo está conformada por la reina y sus obreras. En cuanto a su alimentación, son del tipo carroñeras. Se alimentan de otros insectos o suplementos proteínicos fabricados por mí.

Esta es la colonia Victoria II,  del genero Pheidole SP. La capturé este verano y actualmente espero a que nazcan las primeras obreras (su periodo de incubación es bastante largo, a comparación de las demás)


 La colonia se llama Victoria II porque la colonia Victoria original falleció hace unos meses. Resulta que una colonia del género Linepithema Humile (caracterizada por ser invasora) se metió en mi casa y se coló dentro del tubo de las Pheidole. Destrozaron todo y nadie sobrevivió. Nuevo consejo, escondan bien sus tubos, vigílenlos regularmente y cerciórense que estén bien sellados.

Respecto a este género, las Pheidole si cuentan con una jerarquía social conformada por reinas, soldados y obreras. Cuando nacen los primeros soldados estas hormigas comienzan alimentarse de semillas de girasol además de la proteína, ya que estos miembros de la colonia cuentan con grandes pinzas para poder trozarlas. Su comportamiento también varía con el de las Brachymirmex, ya que son más asustadizas y se esconden ante cualquier estimulo externo.

Mi colonia más reciente está conformada por unas bellísimas Solenopsis invictas, también conocidas como hormigas de fuego u hormigas coloradas. Su reina se llama Lagertha, llegaron el día 7 de enero y así están hoy en día. Es la colonia que más rápido se reprodujo (nada que me haya extrañado, ya que son plaga en varios países del mundo)

Aquello que cargan es comida de gato.Una buena alternativa a la proteína cuando no hay insectos

Esta especie es la más agresiva delas cuatro con las que cuento ahora ¡Hasta la reina arriesga su vida para salir a atacarme! (de ahí el nombre que elegí para ella).
Con la llegada de las primeras obreras, me era imposible salir libre de picaduras a la hora de alimentarlas en su tubo de ensayo, por lo que no tuve más opción que conectarles una caja de forrajeo, para así no meter los dedos o pinzas directamente dentro del tubo. La dieta de esta especie consiste básicamente en proteínas y mezclas azucaradas.

Por ultimo cuento con una hermosa Nylanderia Fulva, también llamada Hormiga loca, dados sus movimientos erráticos e impredecibles. Su reina es Maria Antonieta y llegó el día 4 de enero. A día de hoy cuenta con tres pequeñas obreras. 


Apenas puede distinguirse en la fotografía dado que fue una captura inesperada (se posó en mi mano por casualidad) y el único tubo que tenía guardado era este, el cual es bastante opaco (¡si piensan capturar reinas en verano, recomiendo tener varios tubos de cristal preparados por las dudas!)

Como ven, cada género tiene sus particularidades y debemos conocerlas muy bien para lograr que la colonia prospere. Este es un hobbie que requiere de muchas ganas de querer aprender e investigar.

Respecto a la implementación de la mirmecologia en el aula, pues, la imaginación es el límite. Se puede trabajar interdisciplinarmente en varias áreas del conocimiento: podremos hacer nuestros hormigueros caseros en el área artística, dedicarnos a la observación y a la incorporación de conceptos en ciencias naturales, a la lectura académica y a la escritura de un diario de especie en prácticas del lenguaje, al  comportamiento y la organización social en ciencias sociales, y al conteo y el registro en el área de matemática. Las actividades pueden adaptarse a cualquier edad y se pueden abordar infinidad de contenidos en el marco de un proyecto.

Ya llegando al final de este largo posteo, me queda por aclarar que toda la información explayada en este artículo fue escrita por mí, tomando como referencia mis años de experiencia en el hobbie y la bibliografía citada en la lista de abajo. En ella podrán encontrar libros y enlaces útiles para que para comenzar con su hormiguero, identificar especies, conocer tiendas, comunidades y recursos para el uso escolar.

GUIAS E INFORMACIÓN PARA NOVATOS           

PARA PROFUNDIZAR EN CONCEPTOS, ESPECIES Y SUBGENEROS

CANALES DE YOUTUBE PARA APRENDER Y DIVERTIRSE

COMUNIDADES DE AFICIONADOS (Aquí podrás compartir experiencias, consultar dudas e intercambiar colonias con otros criadores)

TIENDAS DE HORMIGUEROS EN ARGENTINA

RECURSOS PARA DOCENTES

  • Raúl profe: Si bien todas sus actividades y planificaciones están enfocadas para el género Messor Barbarus (una hormiga europea) se pueden realizar diferentes adaptaciones para que encajen con alguna especie latinoamericana que les sea de interés
  • Mis amigas las hormigas: Web desarrollada por docentes en donde detallan una hermosa secuencia didáctica para trabajar en nivel primario
  • Recursos de la Asociación Ibérica de Mirmecologia: Esta asociación tiene un apartado exclusivamente orientado hacia los docentes, en donde podrán encontrar orientaciones para el trabajo en el aula y un listado ENORME de material, recursos, actividades y bibliografía para llevar a cabo sus secuencias didácticas sobre mirmecologia.


miércoles, 11 de noviembre de 2020

Seguimiento de personaje prototípico: la clave para una clase mágica

 ¡Hola!

Hoy les escribo para contarles algo que hice durante mi 2°año como estudiante del Profesorado de Educación primaria, con la esperanza de otorgarles un poco de inspiración para futuros trabajos con sus chicos.

Resulta que, como ya es tradición en mi instituto, para finalizar la cursada de Didáctica de las prácticas del Lenguaje I todas las alumnas tuvimos que dar una clase especial sobre seguimiento de personaje prototípico. La profesora nos dividió en grupos de trabajo y a cada uno se  le asignó un personaje para trabajar: lobos, brujas, ogros, hadas, o princesas, como fue en mi caso.

La clase consistió en una presentación teórica del personaje, haciendo un recorrido histórico sobre su presencia en la literatura y abordando diferentes textos actuales en donde se muestra como protagonista. A continuación hicimos una dinámica en donde presentamos a las princesas, luego contamos una historia mediante una teatro de papel gigante,  y finalmente, como si eso fuese poco, acompañamos la lección con una ambientación completa (y cuando digo completa, es completísima) del aula: decoración, música, rincón de lectura, libros, entre muchas otras cosas.

Les contaré todo lo que hicimos ese día y espero que puedan sacar muchas ideas para hacer una clase especial con sus alumnos, pues, creo que una clase como esta sería maravillosa para ellos.

AMBIENTACIÓN
Dividimos la ambientación en dos partes: exterior e interior. Teníamos claro que en el exterior debíamos hacer algo grande, que crease una fantasía desde el mismo momento de ingresar al aula. Estábamos muy motivadas luego de ver los trabajos de nuestras compañeras, pues, las que trabajaron con lobos por ejemplo, crearon una estructura de hierro forrada en cartón y friselina que transformó la puerta del salón en la mismísima boca del lobo (¡incluso había una alfombra roja simulando su lengua!).

La idea para nosotras  llegó muy fácil. El aula es el "hogar" de los niños cuando están en la escuela, y el castillo es el hogar de las princesas dentro de sus cuentos. Para "teletransportar" a los chicos al estilo de vida de tienen estas doncellas, lo que teníamos que hacer era levantar un castillo dentro del aula. Y lo logramos.




Humilde pero bello, lo que hicimos fue forrar toda la entrada en papel madera y goma eva, dibujando la silueta de un castillo. Así mismo, en cartulina simulamos las rejas de una entrada en el techo e hicimos unas cadenas que conectaban al portón del suelo, colocado a modo de alfombra.

Para el interior, cubrimos las paredes de flores, coronas y tul, y rociamos el lugar con desodorante de ambiente de aroma  frutilla. Para el rincón de lectura improvisamos una biblioteca con algunas cajas de verdura, y conseguí un sillón hecho en cartapesta. Lo forré con tela, le añadí una corona gigante en el respaldo, y  lo decoré con estrellas de goma eva, siendo este el resultado:


En la mesa colocamos un teatro de papel en miniatura junto a un ejemplar de Princesas olvidadas o desconocidas de Philippe Lechermeier, puesto que este fue el texto elegido para abordar el tema de las princesas en la actualidad durante la lección ( Les recomiendo encarecidamente este libro para el trabajo en el aula, es simplemente maravilloso. Sin embargo, ese es tema para otro post )

DINÁMICAS
Iniciamos la clase invitando a nuestras compañeras a pasar al salón con música de diferentes películas de princesas. Una vez dentro iniciamos la clase realizando una teatralización en la cual dos hadas se encuentran dentro de este castillo y comienzan a buscar a la princesa que habita en él. Al no encontrarla comienzan a interactuar con nuestras compañeras (o como sería lo ideal, con los niños) de manera divertida, indagando acerca del paradero de la princesa. Al notar que el castillo esta deshabitado, las hadas se proponen crear una princesa para que viva en él. 

Para ello sacan un caldero (o en nuestro caso, una olla de locro forrada) y comienzan a preparar una pócima para crearla. Los ingredientes de la pócima fueron dictados por los espectadores al preguntar: "¿Que tiene una princesa de especial?¿Como son ellas?". Así, nuestras compañeras empezaron a dictar cualidades como belleza, alegría, dulzura, y las hadas tiraban papel picado de diferentes colores para simular estos ingredientes en el caldero. Llegará un momento en el cual indicarán que la poción esta terminada, y a primera vista parecerá que el hechizo ha fallado, pues, no habrá surgido ninguna princesa del caldero. Es entonces cuando ellas dirán haber encontrado algo al fondo, y sacudirán una tela oculta en la olla que revelará un montón de coronas escondidas al fondo de la olla y llenará a todos los espectadores con el papel picado que fue echado en forma de ingrediente.

Las hadas explicarán que, dado que nuestras espectadoras eran docentes, la pócima falló porque las princesas siempre fueron ellas, ya que todos los adjetivos que se metieron al caldero las definían como maestras. Es por eso que aparecieron también las coronas ( a las cuales, por cierto, les agregamos una etiqueta con un "don", para que las acompañe durante toda su carrera), para coronar a nuestras princesas docentes.

¡Aún tengo la mía! El donde que me tocó fue carisma
¡Aún tengo la mía! El don que me tocó fue carisma

Esta actividad puede ser adaptada fácilmente para los chicos, solo hay que modificar un poco el guión en función de su clase y ¡listo!

Si bien esta dinámica fue muy linda y logramos despertar muchas emociones, el plato fuerte de la lección fue el teatro de papel. Luego de dar toda la parte teórica sobre el recorrido de las princesas en la literatura, nuestra principal atracción fue esta presentación.

Para quienes no saben, el teatro de papel (conocido originalmente como Kamishibai) es una forma de contar cuentos que data desde el siglo XII en Japón. Consiste en un teatrillo, generalmente de madera, a través de la cual un narrador cuenta una historia mediante la presentación sucesiva de diferentes láminas con ilustraciones.


Para cerrar nuestra presentación con un broche de oro quisimos contar la historia de una princesa "diferente" usando este recurso. Para ello decidimos armar un teatro gigante (1mx 70 aproximadamente), de modo que las ilustraciones sean muy amplias y vistosas. La historia que elegimos fue la de un poema llamado Amor en la biblioteca, de la autora argentina Liliana Cinetto, en el cual una princesa decide ignorar lo que ya había sido escrito para ella en los cuentos tradicionales (una bruja malvada y un príncipe que la rescataba) para seguir su corazón y fugarse con un pirata de un libro vecino.
Esta historia (al igual que todas las de Cinetto, para que negarlo) es hermosa para trabajar con los chicos y desconstruir un poco al personaje de la princesa, dándole una dimensión totalmente nueva e inesperada.

Les dejo un video para que puedan ver el resultado de esta de esta idea y asi se inspiren y encuentren la mejor forma de adaptar esto a sus estudiantes. No voy a negar que esta lección involucró un trabajo muy arduo, semanas en donde mi living fue un mar de cartones, pinturas y telas, pero el resultado resultó ser invaluable. Creo que una clase así sería realmente inolvidable para los chicos, algo mágico.

martes, 10 de noviembre de 2020

Una respuesta inesperada: educando en tiempos de pandemia

¡Hola a todos! 

Me gustaría compartirles una reflexión que escribí hace un tiempo y una anécdota que marcó mi historia en la docencia. Educar y aprender en tiempos de pandemia no es nada fácil, pero en medio de esta tormenta encontré una respuesta inesperada que encaminó nuevamente el rumbo de mi vida. ¿Les gustaría conocerla?.

Este post esta dedicado a todos los indecisos, futuros docentes que al igual que yo están buscando una brújula para seguir.

 "Este año llegó para cambiar todos nuestros planes y plantear un panorama totalmente inesperado en todos los aspectos de nuestra vida. El día en que caí en la cuenta que esto está lejos de terminar, y que seguramente no tendría mis tan ansiadas prácticas de tercer año, debo admitir que sentí un leve ataque de ansiedad. Esta cursada iba a ser para mí decisiva, pues, tenía la esperanza de que las prácticas diesen respuesta a la pregunta que últimamente no dejaba de rondar por mi cabeza: ¿realmente soy capaz de ser docente? O mejor dicho, ¿soy capaz de ser una buena docente?

Cuando me anoté en esta carrera, allá por el 2018, me sentía muy confiada de mí misma. Pasé todas las materias sin mucha dificultad y estaba preparada para lo que venga. Fue en segundo año, sin embargo, que una serie de dudas y preguntas comenzaron a sembrarse y a crecer en mi interior. Con cada clase comencé a darme cuenta que ser docente era algo más complicado de lo que pensaba, y con la experiencia de Campo de la práctica en el aula comencé a sentir que yo jamás podría ser como esa docente que observaba.
El miedo se apoderó de mí durante todo el verano pensando que tal vez me había equivocado de carrera, puesto que no sería capaz de afrontar las responsabilidades que un educador tenía. Caí en la cuenta que ser docente no es un trabajo cualquiera, es seguramente una de las labores más grandes que pueden existir, y temía no ser capaz de dar la talla. El saber que no tendría una experiencia que me posicionara directamente en el rol me llenó de temor, pues esperaba que la práctica de este año me confirmara que no había elegido un camino equivocado para mi vida. Este asunto me tenía muy amargada, pero así como la pandemia llegó de forma inesperada, la respuesta que tanto buscaba encontrar llegó también de forma sorpresiva, encarnada en nada más ni nada menos que en un niño de once años. De pronto me encontré encerrada dentro de mi casa junto a un invitado muy inesperado: mi primo Thiago. Sin saberlo en aquel momento, ese nene sería quien terminaría de borrar cualquier tipo de duda respecto a mi profesión. De todos mis primos y sobrinos Thiago siempre fue el más especial, pues, creo que no he conocido en mi vida a un niño más creativo, alegre y soñador. Cuando supe que aún no sabía leer y escribir, no pude evitar sentirme mal por él y por las circunstancias de su vida familiar que siempre lo mantuvieron descuidado y marginado. No era ningún secreto para el resto de la familia que él sufría un leve retraso madurativo, y que a causa de ello fue anotado en una escuela privada de educación especial hace cuatro años. Si bien mis lazos con su familia nunca fueron cercanos, creía casi con certeza que el chico estaba bien, creciendo y progresando con ayuda de su nueva escuela. Pero según lo visto, estaba equivocada.
No voy a ahondar en el tema de esta institución y sus métodos, dado que no sé absolutamente nada sobre educación especial para opinar. Sin embargo, era inadmisible para mí que el niño no haya podido realizar un mínimo avance durante todos estos años. En base a lo poco que sabía de su diagnóstico psicopedagógico, su retraso madurativo no implicaba en absoluto un retraso en su capacidad de aprendizaje. Esto fue lo que me motivó a pensar que, con la ayuda adecuada, él era capaz de aprender. Ganas no le faltaban: lo notaba cada vez que mirábamos el noticiero y se esforzaba por tratar de entender los titulares, cuando jugaba algún videojuego y se frustraba por no entender las instrucciones, o cuando tomaba algún libro de nuestra biblioteca y trataba de adivinar su historia en base a las ilustraciones.
Tenía que hacer algo por él, pero no sabía por dónde empezar. Traté de recordar lo aprendido durante estos últimos dos años, pero me resultaba todo tan teórico que me sentí verdaderamente abrumada, pues, no tenía la menor idea de cómo llevar mis saberes a la práctica. Soy una persona bastante estructurada, y si bien sabía lo que tenía que hacer, no encontraba un modo de “ordenarlo” para hacer que funcione: qué actividades preparar, cuanto tiempo mantenerlas, cuál de todas las estrategias llevar a cabo primero, y demás. Caí en la cuenta de que lo que necesitaba, en efecto, era de una maestra que me enseñara a ser maestra. Supe de inmediato a quien llamar, pues, tengo la suerte de conocer a una de las mejores docentes que pueden existir. Su nombre es Vanesa, ella me orientó en todo lo que necesitaba saber y me ofreció hacer a Thiago partícipe de sus clases pregrabadas con alumnos de primer año.
Trabajamos durante unos días con algunos juegos didácticos y otros recursos para fomentar su interés y evaluar sus aprendizajes previos, y cuando vimos que había un verdadero entusiasmo por parte del chico y que comenzaba a exigirnos más, dimos el siguiente y tan ansiado paso. Thiago me acompañó a la librería a elegir el papel que forraría su nuevo cuaderno (un vistoso afiche del hombre araña) y comenzamos a mediados de abril nuestro camino de hormiguita. Navegamos por las primeras vocales, comenzamos a dar sentido a aquellos garabatos que representaban un nombre propio, conocimos las primeras sílabas con MA ME MI MO MU, escuchamos canciones llenas de poesía, y conocimos las historias de Petit, la princesa Sukimuki, el dragón Zipo, y el incomprendido Lobo. Acompañar a Thiago en sus primeras lecturas fue una experiencia maravillosa. Pude ver con todo detalle cada momento del proceso, cada duda, cada error, cada acierto. Aprendí a ver en qué momento debíamos avanzar, en qué momento debíamos volver, y en qué momento debíamos reflexionar. Me sentía como una especie de faro que lo ayudaba a recorrer estos caminos desconocidos hacia nuevos aprendizajes. No podía hacer el camino por él, pero podía guiarlo hacia su destino. Así, los miedos que habitaban dentro de mí poco a poco se fueron desvaneciendo, dejando lugar a la más pura de las satisfacciones.
Viendo cuanta emoción y cuántas ganas tenía el chico por aprender cosas nuevas, decidí dar un paso más y pedir ayuda a Vanesa con contenidos de matemática. La rapidez con la que Thiago había comenzado a descifrar y escribir sus primeras palabras me había sorprendido, pero lo que pasó con los números es algo que me cuesta creer todavía. ¡Cuánta facilidad tiene este nene para resolver problemas! Adición, sustracción, lo que venga. En sus propias palabras: “esto es una papa porque ahora entiendo cómo funcionan los números”. Y así fue. De pronto, una serie de símbolos que nada significaban para él comenzaron a tener sentido y a ser útiles para todo tipo de cosas, y una vez que lo asimilo, no hubo quien lo pare. Su diversión en estos días fue organizar sus ahorros. Mando a traer la alcancía de su casa y en las tardes se sienta en la cama separando billetes y organizándolos en diferentes cantidades, al igual que en los problemas que tanto le gusta resolver. Ahora sin duda, esta es su materia favorita y me emociona mucho ver lo contento que se pone cada vez que la seño Vane trae una nueva propuesta de matemática.
Este proceso de aprendizaje conjunto fue uno de los viajes más significativos que he tenido hasta ahora en mi vida, y lo más lindo de todo es que aún no ha terminado, pues nos queda mucho por aprender a los dos. La ventaja que tenemos a comparación del principio es que ahora sabemos que todo es posible. Thiago se demostró a si mismo que podía aprender, y yo me demostré a mí misma que soy capaz de enseñar. Todas las dudas que pudimos tener al comenzar se esfumaron, y lo que perdura ahora son las ganas de seguir avanzando para saber hasta dónde podemos llegar juntos. Yo siempre pensé que todo en esta vida pasa por algo y que nada está librado al azar, y mi experiencia en estos meses me lo confirma. Mi primo llegó a mi casa con este desafío justo en el momento en que más lo necesitaba, pues, la experiencia de enseñanza- aprendizaje que viví fue tan íntima y cercana, que no la imagino posible en otras circunstancias. Es gracias a ella que ahora puedo entender todo lo que representa el ser un docente, y lejos de sentir ese miedo inicial, ahora me siento valiente, segura y sobre todo honrada por la profesión que elegí. Estoy segura que dentro de unos cuantos años cuando me jubile y mire hacia atrás, voy a sentirme orgullosa no solo de mi oficio, sino también de todas esas personitas que caminaron junto a mí para enseñarme como Thiago lo hizo esta primera vez."